El desayuno es la comida más importante del día, y no hay nada mejor que comenzar la mañana con unos waffles recién hechos. Son esponjosos, crujientes por fuera y suaves por dentro, y se pueden combinar con una amplia variedad de ingredientes dulces o salados. En este blog, te mostraremos cómo hacerlos para que los puedas compartir con tus seres queridos.
Primero prepara los ingredientes que necesitas para poder hacerlos, es fundamental que tengas en cuenta el gramaje para asegurarnos de que vayan a resultar:
Ingredientes:
– 250 g de harina
– 50 g de azúcar
– 10 g de polvo de hornear
– Una pizca de sal
– 2 huevos
– 350 ml de leche
– 75 g de mantequilla derretida
– 1 cucharadita de esencia de vainilla
Instrucciones:
- En un tazón grande, tamiza la harina y agrega el azúcar, el polvo de hornear y la pizca de sal. Mezcla bien los ingredientes secos.
- En otro recipiente aparte, bate los huevos hasta que estén bien mezclados. Agrega la leche, la mantequilla derretida y la esencia de vainilla. Mezcla nuevamente hasta combinar todos los ingredientes líquidos.
- Vierte la mezcla líquida sobre los ingredientes secos y mezcla suavemente con una espátula o tenedor. Es importante no mezclar en exceso para evitar que los waffles se vuelvan duros.
- Deja reposar la masa durante 10-15 minutos para permitir que los ingredientes se integren y la masa adquiera una consistencia uniforme.
- Mientras tanto, precalienta la plancha de waffles o la waflera a temperatura media-alta y engrasa ligeramente la superficie con un poco de mantequilla o aceite.
- Una vez que la plancha esté caliente, vierte aproximadamente 1/2 taza (125 ml) de masa en el centro de cada compartimento de la waflera. Esto puede variar dependiendo del tamaño de tu waflera, así que ajusta la cantidad según tus necesidades.
- Cierra la tapa de la waflera y cocina los waffles durante unos 3-5 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes. El tiempo de cocción puede variar según la potencia de tu waflera, así que asegúrate de seguir las instrucciones del uso de tu waflera.
- Una vez cocidos, retira los waffles de la waflera con cuidado, utilizando pinzas o una espátula de silicona para evitar que se rompan.
- Sirve los waffles calientes y disfrútalos con tus ingredientes favoritos. Puedes añadir mantequilla, sirope de maple, frutas frescas, crema batida o cualquier otro topping que te guste.
¡Ahí lo tienes! Sigue estos pasos y tendrás unos deliciosos waffles caseros. Recuerda que puedes personalizarlos según lo que prefieras, ya sea con fruta como: banano, fresas, arándonos o añadiéndole un poco de miel.
